En una nueva jornada de movilización popular acompañando a los compañeros del transporte, la voz de Alejandro Gramajo, referente de la UTEP, se alzó entre las columnas de trabajadores, jubilados y organizaciones sociales que acompañaron a los senadores para decirle “no” al saqueo de los recursos y a las políticas de ajuste. Con tono firme pero cargado de humanidad, expresó lo que sienten miles de argentinos frente a un gobierno que, según dijo, solo ofrece represión como respuesta.
“Lamentablemente estamos en manos de un gobierno que la única respuesta que tiene para los trabajadores, para los sectores populares, para los jubilados, es la represión”, señaló Gramajo, tras un operativo policial que intentó frenar la marcha. Sus palabras no fueron solo una denuncia: fueron un grito de bronca frente a la injusticia de ver cómo se golpea a quienes se movilizan pacíficamente en defensa de su dignidad.
El dirigente recordó con dolor el caso de Pablo Grillo, trabajador de prensa que todavía pelea por su vida luego de ser víctima de la violencia institucional en una manifestación en apoyo a los jubilados. “Es una lástima tener que hablar de compañeros heridos cuando lo único que hacemos es reclamar lo que corresponde”, remarcó, apuntando directamente a la ministra Patricia Bullrich, a quien responsabilizó por querer resolver cada conflicto social a palazos.
Para Gramajo, el problema de fondo es claro: mientras crecen el hambre, la pobreza, el cierre de pymes y la pérdida de empleos, el gobierno responde con balas de goma. “No se resuelve el hambre, la pobreza, la pérdida de trabajo con represión. Se resuelve con políticas concretas que atiendan esos problemas. Y hasta acá este gobierno no ha tenido ninguna idea”, sostuvo.
El llamado final fue a la unidad y al compromiso, tanto en la calle como en las urnas. “El freno principal se lo vamos a poner en la calle, con la movilización, pero también el proceso electoral es clave. Necesitamos que los compañeros que encabezan las listas pongan en agenda permanente los problemas de la mayoría popular: el hambre, la pobreza, el cierre de empresas, la situación de los jubilados. Porque lo que se juega es el futuro de los trabajadores y del pueblo argentino”, concluyó.